About This Project

La Ciudad Expandida como objeto de problematización del Diseño

Autoras y autores:
Adriana Sarricchio; María Eugenia Cardoni; Federico Raviol; Nelson Bressan

En el marco del Proyecto CAI+D “Ciudades Creativas: Aportes a la enseñanza del arte y el diseño” (LIDEM, FADU-UNL), este trabajo pretende aportar reflexiones en el cruce entre cultura digital, espacio urbano y la multiplicidad de relaciones que se establecen entre los sujetos y con su hábitat. Observar la interacción entre nuevos espacios digitales que extienden los límites físicos de las ciudades y los nuevos vínculos, que se caracterizan por la participación en redes, relaciones difusas y la asincronía, nos permite entender lo que Félix Manito llama “Conciencia de lo Expansivo” como una actitud en los que formamos parte del proceso de enseñanza-aprendizaje y a la “Ciudad Expandida” como el nuevo campo de acción de todos los diseños, a partir del cual, resignificamos nuestras prácticas.

El desarrollo de nuestra sociedad y de los espacios urbanos, coexisten en una realidad donde la cultura de lo digital atraviesa la multiplicidad de relaciones que se establecen entre los sujetos y en vinculación con su hábitat. Como afirma Félix Manito, la innovación, la creatividad, el emprendimiento, la participación, el compromiso compartido y la cultura abierta, son cualidades que definen un modelo que más que tecnológico implica una actitud en todos los actores que forman parte del proceso de transformación de nuestras ciudades. La conciencia de que existe una ciudad que trasciende la física, una no tangible, que se resignifica en una trama de vínculos transmediales, nos permite entender el sentido de la “Ciudad Expandida”, (Félix Manito, 2012) y ampliar nuestra mirada crítica – reflexiva. Una ciudad que extiende sus límites territoriales generando nuevas configuraciones espaciales, maneras diferentes de apropiarse de los espacios, que demanda una adecuación de las prácticas para operar, indagando sobre las diferencias que le otorgan singularidad y permiten reconocer cada lugar. Así la ciudad, configuración social por excelencia donde operan todos los diseños, se actualiza como objeto de problematización, permitiéndonos reflexionar acerca de las estrategias didácticas, que incorporando a las prácticas formativas dispositivos tecnológicos, faciliten el proceso de reconocimiento del fenómeno urbano, recreando y resignificando el sentido del hábitat y del habitar, hoy en una ciudad de calles vacías.

El aislamiento físico en el que nos encontramos, como mecanismo de defensa ante el avance del Covid-19, acentuó la necesidad de utilizar los procesos de virtualización digital, en las prácticas del taller, que si bien ya se encontraban instalados, como apoyo a la presencialidad, hoy constituyen un instrumento que nos permite aproximarnos al objeto de estudio desde una multiplicidad de puertas de ingreso. Esta situación nos plantea la aparición de nuevas formas de habitar el espacio público que trasciende los límites físicos y permite que el estudiante lo atraviese, inmerso en una experiencia espacial simulada.

“El sujeto se aleja del espacio exterior como referencia y es capaz de desdoblar su existencia en múltiples espacios y tiempos, en múltiples “sí mismos” al interconectarse y existir en el espacio y tiempo virtual. Se forma el mundo en que la pluralización de los sujetos se convierte en la característica sobresaliente”.

El espacio y el tiempo se transforman, se contraen y se dilatan, combinando al sujeto que camina el espacio en persona, con el que lo recorre a la distancia, lo sincrónico con lo asincrónico, lo virtual y lo físico, posibilitando la exploración activa de mundos alternativos. El sujeto manipula el espacio y el tiempo según sus deseos.

“Se entra por entero en un espacio metafórico de configuración mutante, con múltiples posibilidades de combinación de diverso grado entre ámbitos con existencia física localizable que ofrecen experiencias de permanencia, previsibles y repetitivas, tanto como con dominios alegóricos y proyectivos de carácter diversificado y variable”.
Esta ciudad expandida a través de dispositivos tecnológicos, constituye un territorio de aprendizaje, abriendo el campo operacional con una mirada holística, integradora, que intenta comprender la diversidad de factores que conforman la lectura e intervención en la ciudad, como escenario material donde se desarrolla la vida.

Es imposible ya, comprender a las ciudades encorsetadas por límites físicos cerrados; se va construyendo a sí misma y es inimaginable capturarla en su totalidad. La dinámica de crecimiento que se evidencia compleja, desigualitaria, desordenada; “monstruos, megalópolis por todas partes” como afirma Alfons Cornella, requiere por parte de los proyectistas diseñadores, agudizar la lectura de las condiciones permanentemente cambiantes de las ciudades, evaluando la adaptabilidad a los cambios que tienen las mismas, con planificaciones abiertas y acompañadas de un sistema tecnológico sensible que colabore en la gestión de estos organismos complejos.

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“Pensar la ciudad, más allá de la ciudad” (Saskia Sassen, 2018), remite a la necesidad de hacer uso de las tecnologías digitales, que no solo enriquecen y facilitan los procesos de colaboración, el pensar y hacer con otros, externalizando lo producido; sino que han modificado los sistemas de transmisión de conocimientos.

Así, como correlato de estas condiciones, podemos hablar de una “educación expandida” en un mundo en red. Nos enfrentamos a la generación de nuevas prácticas educativas, que sin lugar a dudas serán experiencias disruptivas en el campo de las didácticas. Esto conlleva a un cambio actitudinal del docente y el estudiante, en la necesidad de tomar “conciencia de lo expansivo”, para que los procesos de aprendizaje puedan enriquecerse con el aporte de recursos digitales y así operar en una realidad que ha mutado y que lo seguirá haciendo.

El reto entonces, como activadores en el proceso de enseñanza-aprendizaje, está en generar conciencia e interés de conectarse, el deseo de enfocar las miradas hacia nuevas formas de reflexión en acción, en grupos operativos y convirtiendo los talleres virtuales, en laboratorios de aprendizajes compartidos, donde el pensamiento y la practica siempre es con otros. La mirada del sujeto dentro de este escenario ha cambiado. Su rol de espectador que contempla a la distancia, es potenciado con la invitación a atravesar el espacio de manera virtual, sintiéndose parte, incorporándose activamente a lo que se está transformando, como agentes de transformación. Una nueva manera de “componerse con el mundo” (Pablo Sztulwark, 2015), una nueva experiencia de un sujeto comprometido con el espacio y el tiempo.

Reutilizar las tecnologías y las redes con las que ya contábamos y con la que los estudiantes se encuentran familiarizados, nos proporciona una inigualable oportunidad de aprendizaje. Se han hibridado en forma íntima con los comportamientos cotidianos. Les son propios la narrativa hipertextual digital, la capacidad de navegación de manera libre y constante. “Los procedimientos y los relatos se hacen divergentes, tienen discordancia y discrepan, pero una no sustituye a la otra, todo lo contrario, se necesitan mutuamente y convergen en nuevas producciones” (Temporetti, pag.11). Convertir nuestros talleres virtuales en verdaderos laboratorios de intercambio de ideas, de opiniones, multiplicando las diferencias, nos posibilita repensar prácticas innovadoras y fomentar espacios donde se pueda inventar. La velocidad, diversidad y cantidad de información, dinamismo propio de éste nuevo entorno; lejos de generar conflictos, nos otorga una maravillosa puerta para activar procesos reflexivos, multiplicando las posibilidades de generar un saber colectivo.

Este proceso, solo será posible, con el diseño de nuevas prácticas y con docentes comprometidos y conectados, con nuevas habilidades, preocupados por suturar las propuestas pedagógicas con la lógica de la tecnología.

Como advierte Alejandro Piscitelli, “la cuestión fundamental se encuentra en la gestión de la información y en plantear la preguntas correctas para reducir la complejidad y decidirnos por lo verdaderamente significativo”.

La ciudad se encuentra atravesada por una gran diversidad de información, muchas veces irrelevante y superabundante. Nuestro desafío como docentes es simplificar este entramado de comunicaciones y “salir adelante con saberes incompletos, frágiles y sobre todo distribuidos”. (Alejandro Piscitelli, 2011)

Convocar diversas voces, con diálogos expandidos y estar atentos al reconocimiento de usos culturales, nos dará indicios de dónde transitan nuestros estudiantes. Problematizar con ellos, nos permitirá ajustar las prácticas que los hagan sentirse involucrados, repensando nuevas categorías para comprender esta Ciudad Expandida.

“Desde esta perspectiva, el arte de enseñar, no consiste solamente en el dominio de las técnicas de transmisión de los saberes, sino también en la capacidad y el virtuosismo para construir problemas frente a los cuales se nos vuelva imprescindible volver a pensar.
Finalmente, la conciencia de lo expandido nos posiciona frente a dos desafíos: en la relación con los estudiantes, a un tiempo de invención; donde no es suficiente poner recursos digitales a su disposición, sino crear narrativas pedagógicas que articulen saberes y prácticas, orientados a formar sujetos que tengan la capacidad de anticiparse y de imaginar las ciudades en un mundo que se reinventa.

Por otro lado, la necesidad de humanizar el proceso de enseñanza dentro de esta escena donde la virtualidad tiene un protagonismo casi absoluto. La existencia de pantallas condiciona las relaciones interpersonales y el modo en que el saber es asimilado. Interpelar al estudiante para que vuelva a poner el cuerpo; sus gestos, su voz, su mirada, en función a despertar el resto de los sentidos y así constituirse como habitante de la ciudad, como agente de memoria, como SER URBANO.

Bibliografía

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Fotografías
María José Appendino y Lucía Carboni

Del autor 

sarricchio

Especialista en Didáctica del Proyecto.
Arquitecta

cardoni

Arquitecta

raviol

Arquitecto

nelson

Arquitecto

Palabras claves

cultura digital • espacio urbano • ciudad expandida • subjetividades

Presentación del artículo

XI Congreso Latinoamericano de Enseñanza del Diseño. Universidad de Palermo. Buenos Aires, 2020